05 septiembre 2014

Al cine. El Niño, la nueva película del director de Celda 211


Daniel Monzón regresa con otro thriller , cinco años después de la trepidante Celda 211 (2009). Esta vez sale de la atmósfera asfixiante de la prisión, para bajarse al moro. La historia de El Niño se ambienta en un entorno tan cercano para nosotros como es la situación estratégica de España como puerta de entrada de la droga que llega de África. Con Gibraltar y Ceuta como piezas clave de dos clases de negocios, los que cruzan para sacar cuatro duros y solventar sus miserias, y los del negocio gordo del narcotráfico. 

Monzón ya es un experto en ofrecer un discurso audiovisual tan potente como el que vemos en producciones que multiplican en varias cifras su presupuesto. El Niño tiene un presupuesto de sólo 8 millones de euros. Excelentes la fotografía y el montaje, con la secuencias de persecuciones aire-mar, y las secuencias y panorámicas generales, donde se coge el pulso al engranaje del puerto. Aunque en contra, me ha parecido que esta película descuida el hilo argumental, mareando al espectador con un entramado con demasiados personajes. Aunque consigue crear un gran climax y una muy buena carga dramática. Buenos los diálogos, geniales los de la tripulación del "pájaro" y las conversaciones casi espontáneas de los tres jóvenes. 


El casting: Tosar repite con Monzón

Y que decir del elenco, de lo mejorcito del cine actual. Un Luis Tosar (Los lunes al sol, Te doy mis ojos, Celda 211 ) inmenso (como siempre) y estrenando peluca, y un Eduard Fernández (El método, Pa Negre, Biutiful) y Sergi López, (Harry, un amigo que os quiere, El laberinto del fauno) también de premio. No me olvido del papel femenino de Bárbara Lennie (Obaba, Todas las canciones hablan de mi) una secundaria que me gustaría ver de protagonista. Pero si la película tiene tirón entre el público joven es por la aparición y debut de Jesús Castro, comparado por sus ojos con un nuevo Paul Newman. (aquí se han pasado, aunque el chico se ha defendido muy bien para ser un neófito en esto).

La película El Niño, además de ser de una temática totalmente actual y sangrante, hace sus guiños sarcásticos a ciertas instituciones y su corrupción. Me llamó la atención del parecido de uno de los personajes, el llamado el inglés, a Francisco Correa, el de la Gurtel. Y es que la realidad tantas veces supera a la ficción, que casi hablamos de simbiosis.

¿De que va El Niño?

Frontera sur de Europa. Dos continentes, tres países, 14 kilómetros… tierra de contrabando. Desafiando la autoridad de los capos locales, tres chavales de apenas 20 años deciden montárselo por su cuenta y se introducen en el mundo del narcotráfico casi como un juego. Es mucho dinero al alcance de quien tenga el valor de atravesar la distancia casi inexistente entre España y África volando sobre las olas en una lancha cargada de hachís y con la policía pisándote los talones.

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